Une autre vie

 Esta semana fue de confrontaciones. Todo empezó cuando el viernes por la noche íbamos camino al Hotel Haya en Ybor, pues íbamos a pasar la noche ahí y tener una noche especial. Cuando íbamos en camino, le enseñe los diseños de frutas que quiero que pintemos ambos para nuestro comedor. Se los ensene y me empezó a decir que acuarela es muy difícil de pintar y que el no puede hacer eso. Le dije, está bien que no sepamos como, eso es lo que lo va a hacer especial, que ambos vamos a hacer el mejor esfuerzo y va a ser algo en equipo.  Luego me puse a buscar diseños en oleo pues, Eric sabe pintar Oleo. Cuando le enseñé los diseños de frutas en Oleo me dijo que eso tampoco podíamos hacer, que yo ni siquiera sabía pintar, que iba a ser muy difícil. Entonces en mi tristeza y frustración le dije, si no puedo pintar acuarela y tampoco Oleo, ¿entonces que puedo hacer?  A lo que él me contesto, no puedes hacer nada, no eres buena para nada.

El sábado tuvimos un evento y en mi frustración y tristeza choque mi carro. Eric no me puede ni ver. No fue intencional, fue un accidente. Eric parqueo mi carro y cuando me baje de él, mi pie se sumergió completo en un charco. Le dije que parqueara bien el carro para que pudiera bajarme en la acera y no lo hizo. Entonces le pedí las llaves para hacerlo yo, y cuando me subí y presione el pedal con el zapato empapado se me resbalo y choque el carro de atrás. No fue grande el golpe, pero debo de cambiar el bumper de atrás.

Lloré y en mi frustración le pedí ha Eric que por favor ya paráramos con esta intensidad de problemas. Él dice que sí, pero sigue haciendo comentarios que me hieren. Quiero que esto pare.